Crianza media de 12 meses en barricas de roble francés y americano.
La añada 2020 estuvo marcada, desde el punto de vista climático, por temperaturas ligeramente superiores a las habituales de la zona, pero el fenómeno más influyente fueron las elevadas precipitaciones recogidas entre los meses de marzo y mayo, dando como resultado a una de las añadas más lluviosas de los últimos años. Esto influyó en el viñedo, dando lugar a un alto crecimiento vegetativo de las cepas y con ello una excelente maduración de la uva retrasándo la fecha de vendimia hasta finales de septiembre, evitando así los meses más calurosos del año en El Valle de La Raja y produciendo vinos bien estructurados y equilibrados al mantener una gran acidez.